GUAY | Revista de lecturas | Hecha en Humanidades | UNLP

PERFORMANCE/INTERVENCIÓN CALLEJERA
DANIELA CAMEZZANA Y VERÓNICA CAPASSO

Un país hecho bolsa. Resignificaciones del recurso de la bolsa en performances de protestas callejeras (2021)

     En el transcurso de la semana en la que se dieron a conocer un conjunto de irregularidades y/o excepciones realizadas a la gestión de la vacunación por etapas dispuesta en el Plan Estratégico para la Vacunación contra la Covid-19 en la República Argentina, comenzó a circular en las redes sociales una convocatoria a marchar el sábado siguiente a la Plaza de Mayo -la más antigua de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y escenario simbólico de los acontecimientos políticos, populares y/o ciudadanos más importantes de la historia del país-. Casi en simultáneo se difundió el llamamiento en medios de comunicación de alcance nacional como por ejemplo el Diario Clarín que en el trabajo de jerarquización de la información, seleccionó como principal consigna la demanda de justicia por el #VacunatorioVIP y por la “angustia de los adultos mayores”, por sobre otras demandas asociadas por lxs usuarixs al Banderazo -como, por ejemplo, clases presenciales, corrupción, economía-. 

     Mientras comenzaban a congregarse lxs asistentxs del “Banderazo” realizado el 27 de febrero de 2021, unxs disponen diez bolsas negras parecidas a las de consorcio o uso doméstico pero del largo de una persona (aproximadamente 1,60 m) sobre las baldosas grises a dos metros del lado externo del enrejado perimetral de la Casa Rosada. En la foto (imagen 1) del diario Página 12, citada por ser uno de los pocos registros públicos del momento de inicio de la acción performática, se puede ver a un joven vestido íntegramente de blanco hasta el tapabocas, que sostiene un extremo de la bandera violeta de la agrupación Jóvenes Republicanos (JR) la cual ocupa casi cuatro paneles. JR es una agrupación política que nació en el 2020, en el contexto de pandemia y cuarentena, y que tiene la característica de que la edad de sus miembros oscila entre 16 y 30 años. Según definen en su página web, persiguen valores republicanos y sostienen la lucha por la república y la libertad. Desde su creación, realizan charlas con referentes políticos y expertos en diferentes temáticas y encuentros de formación virtual sobre historia argentina, proponiendo otro revisionismo diferente al enseñado en instituciones educativas. Por último, usan las plataformas digitales para redactar y viralizar diversos contenidos, en especial Instagram y Twitter, las cuales, además les permiten mostrar el minuto a minuto de las performances.

     Cuando logran colgar la tela de los barrotes, aproximan las bolsas hasta el cantero que divide la vereda de la Plaza de Mayo del cerco perimetral de la Casa de Gobierno. La bandera queda centrada para que en la foto de la fachada cruce el cuerpo principal del edificio, a un lado de las bolsas que se colocan en el medio exacto del corredor principal de la plaza. Cada bolsa está atada en los extremos por una cinta de embalar marrón y rellena con papeles de modo tal que da la impresión de un “cuerpo inerte”. La prolijidad de los carteles confeccionados y diseñados previamente contrasta con la disposición despareja del material de relleno y de los bultos entre sí producto del traslado o las sucesivas maniobras para acomodarlos. Los “cuerpos” están identificados a la altura de la cabeza o el esternón con unas impresiones en hojas A4, con una primera línea en celeste que dice invariablemente: “Estaba esperando la vacuna pero se la aplicó” y en el medio de la hoja en mayúscula y centrado menciones más específicas a personas como “Estela de Carlotto”, “Martín Guzmán” y “Daniel Scioli” junto a otras generales como “los pibes de la Cámpora”; “la familia de Duhalde”; “los amigos de Alberto”; “la mujer de Zannini”; “el hijo de Moyano”; “los suegros de Massa” y “el sobrino de Ginés”. A pie de página se ve un águila, el logo de Unión Republicana (UR) y el caballo insignia de JR. 

     Según la propuesta programática de la acción explicada en distintos medios de comunicación, las bolsas aludían a las personas que fallecieron “o van a fallecer” por el virus señalando que “hay un argentino en esas bolsas porque otro se le adelantó”. Más allá de la veracidad de la información suministrada por la acción, la forma en que la misma fue consignada recibió críticas en tanto el contrato de lectura de los distintos elementos se reduce a la “letra chica”. Así se tome el punto de vista de los transeúntes o de lxs usuarixs de las redes sociales, la comprensión de la crítica o denuncia requiere una relación de proximidad con la imagen corporeizada (los muertos) que no suplanta necesariamente lecturas previas realizadas entre el texto en mayúsculas (nombre) y la figuración del cuerpo. Es por esto que la interpretación prevalente fue que las bolsas “contenían” los cuerpos de las personas mencionadas en los carteles o que “merecían” la muerte por sus acciones. 

     En ese sentido, la dimensión polémica de la acción sobrepasa lo que se declara en entrevistas posteriores como el conflicto tematizado en la instancia programática, habilitando más de una controversia en torno a la aparición de JR. Es decir, si bien la acción propone la conversación sobre el plan de vacunación y las consecuencias de la pandemia, produce una serie de operaciones que establecen relaciones de causalidad entre fenómenos distintos dándolas como evidentes sin respaldo de una carga probatoria sino que estaban ahí para ser “mostrados” al público general. Entre las múltiples conversaciones que se abren a partir de la acción, se establecen una serie de “confusiones productivas” tales como:

  • Vincular las consecuencias de la pandemia (fallecimientos por factores relacionados al Covid 19) a las medidas concretas alcanzadas por el gobierno nacional para la gestión de ese panorama.
  • Establecer como “falta” de transparencia en la comunicación la ausencia de imágenes vinculadas a lxs fallecidxs en tanto no aparecieron fotografías de cuerpos en las calles como en Perú o los entierros masivos en Brasil. Desestimando que la ampliación del sistema de salud y atención pública de los casos tenga relación con la falta de registro y/o “existencia” de esas escenas en la Argentina. 
  • Relativizar el rol de los activismos en la producción y divulgación de información, en este caso sobre el uso discrecional de los recursos públicos, realizando afirmaciones totalizantes como “los pibes de la Cámpora” o “los amigos de Alberto” que no son posibles de verificar o dan cuenta de grados de responsabilidad, etc.

 

     La performance, en tanto acontecimiento dentro del Banderazo, produjo cierta “atracción” más que “rechazo” en tanto se fotografió, filmó y difundió en simultáneo formulando un registro descoordinado y casero que multiplicó “las vistas” de la propuesta. La reproducción de la imagen fue sostenida a lo largo de los días más allá de la posición de las personas (a favor o en contra). En cuanto a las imágenes disponibles en la mayoría de las fotografías, no se establece una relación directa entre el cuerpo de lxs jóvenes que llevaron a cabo la acción o quienes toman registro a modo de pose o selfie sino que la presencia de lxs asistentes aparece mediada por la sombra. En los registros fotográficos, se produce un efecto de amalgama entre las personas que se paran a “los pies” de las bolsas y “los cuerpos” desparramados en la vereda “proyectando” extremidades como los brazos o la totalidad del cuerpo (imagen 2). En algunas fotografías (imagen 3), se observa cierta intención de “firmar” la acción a través de pins de las agrupaciones debajo de los carteles pero los mismos fueron retirados aparentemente después de obtenidas las imágenes. 

     Antes de concluir el encuentro, las bolsas son vueltas a mover para ser colgadas directamente del enrejado que divide la Casa de Gobierno de la Plaza (imagen 4). Esta vez más agrupados y ya algo desvencijados, “los cuerpos” quedan expuestos “a la vista de todos” y sobre todo, de lxs agentes de la policía que custodian el lugar.

     Uno de los referentes de JR, Ulises Chamorro, sostiene en diversas entrevistas que la acción fue pensada “sobre la marcha” y que resultó “un éxito” justamente por las repercusiones y la atención que “las famosas bolsas mortuorias” despertaron en propios y ajenos. 

     Por otro lado, Chamorro establece como destinatarixs de la acción además de lxs asistentes al acto, otrxs que acceden de forma mediatizada o hipermediatizada en las redes sociales apuntando específicamente a las repercusiones fuera del país. En tanto “recurso” como denomina a la acción, el joven sostiene que resulta efectiva no por su efectividad en lo comunicativo sino porque lxs permite “ingresar” al escándalo del Vacunatorio VIP, es decir, ser parte de la agenda pública y “cruzarse” con otrxs referentes políticos con más trayectoria. 

     Por su parte, la diseñadora Maia Ocampo, asume la discusión específica sobre la composición de la acción como recurso para “mostrar la realidad” y “despertar” a la sociedad. Dentro de las líneas de acción, Ocampo señala que este tipo de expresiones apunta a una dimensión simbólica en la que se proponen dar una batalla cultural (Entrevista radial, REALPOLITIK.FM, 3 de marzo de 2020). Por último, en ambos casos al ser interpelados en vistas de la polémica, lxs referentxs de JR responden que “reivindican”, “están convencidos” y se enorgullecen de la acción porque interfiere con los procesos de “victimización” de lxs adversarios. 

     Cabe en este punto pensar la noción de “transgresión” que propone Stefanoni (2021) asociada a ciertas formas de la rebeldía juvenil – que subyacen en los discursos de JR – frente al reclamo de lxs periodistxs, líderes políticxs y otras figuras públicas de reconocer un “exceso” en la manifestación. En lugar de pedir disculpas o retractarse por los efectos, lxs jóvenes reivindican la “incorrección” política como “una forma de decir las cosas como son, en nombre del pueblo llano, mientras que las izquierdas -culturalizadas- serían sólo la expresión del establishment y el status quo” (p. 65). Es por esto que definen la acción como “un éxito” en tanto expone más allá de los cuerpos, la reacción de “una élite progresista” que busca imponer su visión y “perseguir” otras formas de concebir el mundo. 

     Por último, señalamos que en tanto recurso, la utilización de las bolsas para hacer referencia a las violencias, padecimientos o la precariedad que pesa sobre los cuerpos fue utilizado en reiteradas ocasiones tanto en marchas como en intervenciones del espacio público en distintos momentos sociopolíticos del país. De las distintas referencias en este sentido, destacamos las acciones del Grupo Escombros (GE), que nace en La Plata en 1988, cuya trayectoria fue reseñada en el artículo “Grupo Escombros. La Estética de la Solidaridad (2020)” de María de los Ángeles de Rueda.

     A fines de los 80, GE usa la bolsa como elemento para denunciar la corrupción estableciendo una analogía entre la misma con los efectos de la acumulación de la basura en la obra “Montaña” (imagen 5). También aparecen con 500 bolsas de residuos de color negro en la muestra Arte en la Calle en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA) en la obra titulada “Mar” (1993) (imagen 6). Por último, la fotografía titulada “Carrera de Embolsados” retrata cinco cuerpos en movimiento cubiertos por bolsas de nylon negro en un paisaje incierto. La imagen fue una de las 13 fotografías en blanco y negro que conforman la obra Pancarta I exhibida en noviembre de 1988 debajo de la autopista en el barrio de San Telmo. Los cuerpos fotografiados evocan la violencia expresiva, es decir:

 

     (…) por movimiento o reposo, los límites de la lucha y la resignación. Los rostros cubiertos, algunos cubiertos de bolsas, la posición abatida. Si hay una figura, como en las siluetas emblemáticas realizadas para las marchas por los desaparecidos, que resume el recuerdo de la tortura, es el del cuerpo aprisionado, agachado, cegado. (de Rueda, 2005, p. 8-9).

     Más allá de los posicionamientos políticos de los grupos mencionados, JR y GE, y de si JR tiene presente la genealogía de la utilización de este elemento en las performances de protesta, el recurso bolsa negra presenta una plasticidad que permite poner en contacto ideas e impresiones como la descomposición social y la corrupción con los cuerpos. ¿Qué le hace la inscripción de esta acción en nuestro imaginario a las futuras manifestaciones progresistas que adopten este elemento?

 

Bibliografía

     Rueda, M. D. L. Á. D. (2005). Cuerpos replicantes: sobre las Pancartas de Escombros y el arte múltiple. En: I Congreso Iberoamericano de Investigación Artística y Proyectual. La Plata: Facultad de Bellas Artes.

 

     Stefanoni, P. (2021). ¿La rebeldía se volvió de derecha? Cómo el antiprogresismo y la anticorrección política están construyendo un nuevo sentido común (y por qué la izquierda debería tomarlos en serio). Buenos Aires: Siglo XXI Editores.

 

Referencias:

Imagen 1: Fotografía publicada en el diario Página 12. Imagen: Kala Moreno Parra.

Imagen 2: Toma directa realizada por un participante del Banderazo.

Imagen 3: Fotografía de la acción en la que se ven los pines de las agrupaciones.

Imagen 4: Fotografía publicada en distintos portales de internet. (s/a)

Imagen 5: Motaña – Grupo Escombros, fines de los ‘80.

Imagen 6: Mar – Grupo Escombros (1993)

Imagen 7: “Carrera de embolsado” de la obra Pancartas 1 (1988) del Grupo Escombros. Fuente Galería Walden.

 

 

1 Veáse: https://www.argentina.gob.ar/coronavirus/vacuna.

2 A modo de ejemplo, véase: https://www.clarin.com/politica/-27f-oposicion-llama-marchar-plaza-mayo-gobierno-vacunatorio-vip_0_-rgde4__K.html

3 Véase: https://www.jovenesrepublicanos.com.ar 

4 Véase: https://www.instagram.com/jovrepublicanos/ 

5 Véase: https://twitter.com/JoRepublicanos 

6 Así lo explica Maia Ocampo, militante de Jóvenes Republicanos y diseñadora de las acciones performáticas que la agrupación lleva adelante. Entrevista REALPOLITIK.FM. Jóvenes Republicanos: “Los que tergiversaron la intervención son los mismos de siempre”. 3 de marzo de 2021. 

7 En este punto, queremos señalar que algunas de las personas mencionadas habían recibido la primera dosis porque les correspondía por edad; presentaban afecciones subyacentes que determinan que corren mayor riesgo y/o luego se constató que no habían accedido al “Vacunatorio VIP”.

8 Vale mencionar pedidos explícitos como el que se formula en la nota de opinión del periodista, Mempo Giardinelli de establecer penas para “responder legalmente” ante dichas situaciones. Véase: https://www.pagina12.com.ar/358799-parar-el-odio.

DANIELA CAMEZZANA

Es investigadora, comunicadora y artista. Es licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Actualmente cursa el Doctorado en Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Integra el  “Grupo de Estudio sobre Cuerpo” (GEC) y participa del proyecto de investigación titulado “Cuerpo, afecto y performatividad en prácticas artísticas contemporáneas” (FaHCE – UNLP). Colaboró con Cosecha Roja, Revista THC, Perycia y Revista Anfibia, entre otros.

VERÓNICA CAPASSO

Es socióloga e historiadora del arte. Doctora en Ciencias Sociales en la Universidad Nacional de La Plata. Investigadora asistente de CONICET. Ayudante diplomada en la cátedra Cultura y sociedad de la FaHCE-UNLP. Coordina el Grupo de lectura Estudios sociales del arte, la cultura y la política en Latinoamérica (CISH-IdIHCS). Investiga sobre arte/cultura visual, política y afectos. Participa del colectivo editorial de la revista de arte contemporáneo boba.